Venta otorgada por Pedro Palomino, cura y vicario de Bayaguana, a Manuel
Mejía, capitán de lanceros, y a su legítima mujer Juana Casimira de
Frías, de un hatillo nombrado Santa Ana con 67 reses vacunas y otras
cosas más, por la cantidad de 907 pesos en monedas de ocho reales de
plata. Firmado por Lucas de Urquerque, alcalde ordinario.
Venta otorgada por Pedro Palomino, cura y vicario de Bayaguana, a Manuel
Mejía, capitán de lanceros, y a su legítima mujer Juana Casimira de
Frías, de un hatillo nombrado Santa Ana con 67 reses vacunas y otras
cosas más, por la cantidad de 907 pesos en monedas de ocho reales de
plata. Firmado por Lucas de Urquerque, alcalde ordinario.